El libro de Sergio García Long es un estudio muy útil para abogados de muchas jurisdicciones por su enfoque comparativo. Demuestra que existen importantes diferencias entre los derechos contractuales nacionales, e incluso entre los distintos instrumentos internacionales.
Esto es especialmente relevante cuando no se trata de una imposibilidad física, sino de un cambio que hace que el contrato carezca de sentido o sea mucho más gravoso para una de las partes.