Definir la justicia, la razón o la libertad, ¿no es acaso decir lo que merece ser realizado, buscado o aprobado? ¿ Y por qué sorprendernos, entonces, si las distintas definiciones que adoptamos en el ámbito de los valores conducen a oposiciones radicales, e incluso irreductibles? ¿Es cierto que abandonamos el uso de la razón cuando se trata de evaluar un proyecto, hacer una elección o justificar una decisión? ¿Cómo razonamos en todos los casos en que el estudio científico de un problema práctico no nos proporciona una respuesta indiscutible?
En el presente volumen, Perelman se plantea estos desafíos que, según refiere en el prólogo, complementan y desarrollan sus investigaciones iniciadas en su monumental Traité de l’argumentation (La nouvelle rhétorique), escrito junto con Oblrechts-Tyteca. Desde esta perspectiva, según señala, «La visión que se perfila traslada gradualmente el centro de gravedad del pensamiento filosófico de las categorías de verdad y demostración a las de justificación y decisión razonable, quedando la razón teórica subordinada a la razón práctica.
La noción de justicia ha sido reexaminada desde la nueva perspectiva, para completar su análisis con las aportaciones del trasfondo histórico y de la teoría de la argumentación. En cuanto a sus aspectos formales, conservan un lugar importante, incluso esencial, en la sistematización de nuestro pensamiento, especialmente gracias a la regla de justicia, que se convierte en la regla maestra de la razón práctica.» (Del prefacio del autor)